Los sustantivos se pueden clasificar en comunes o propios, individuales o colectivos ,concretos o abstractos, contables e incontables:
- Los sustantivos comunes nombran a las personas, los animales, las cosas, las plantas o los lugares en general.
- Los sustantivos propios nombran a las personas, los anilaes, las cosas, las plantas o los lugares para distinguirlos de los demás de su clase
- Los sustantivos individuales nombran a una sola persona, animal, cosa, lugar o planta.
- Los sustantivos colectivos nombranm aunque estén en singular, a un conjunto de personas, animales, plantas, lugares o cosas
- Los sustantivos concretos nombran a las personas, los animales, las cosas, las plantas o los lugares que se perciben con los sentidos
- Los sustantivos abstractos nombran sentimientos o ideas que no se perciben por los sentidos; no se huelen, no se ven,...
- Los sustantivos contables son aquellos que se pueden contar, es decir, que es posible establecer su número de unidades
- Los sustantivos incontables son aquellos que no se pueden contar.
Facil, ¿no?. Ahora practiquemos con los sustantivos y sus clases con la siguiente actividad:
LA TORTUGA SABIA
Era
una tortuga que sabía de todo: qué día empezaba la primavera, quién
descubrió América, por qué el elefante tenía trompa… y muchas
otras cosas más. Sin embargo, el día que cumplió cien años
descubrió que no sabía su nombre. Y se puso muy, pero muy triste.
Tanto que empezó a llorar con grandes lagrimones…
—De
qué me vale saber tanta cosa —se dijo— si no sé cómo me llamo.
Su
amigo el tortugo, que había venido a visitarla y a festejar con ella
su cumpleaños, quedó asombradísimo. Nunca había visto llorar a una
tortuga. Pero en cuanto ésta le contó el motivo, lo comprendió
enseguida. Y le aconsejó:
—¿Por
qué no te vas de viaje, tortuguita sabia? A lo mejor, preguntando y
preguntando, encuentras a alguien que sepa decirte tu nombre.
Así
fue como la tortuga preparó su valija y, siempre llorando, se fue por
el mundo a averiguar su nombre. Anduvo y anduvo, pero nadie supo
informarla. Ni el elefante Elegante, ni la mariposa Rosa, ni el loro
Coro.
Al
cumplir doscientos años, llegó de vuelta a su casa. El tortugo la
estaba esperando con una torta de doscientas velitas. Y un sobre
grande, color rosa. Era una carta de la lechuza Fusa, el más sabio de
los animales de este mundo; y en ella le anunciaba que su nombre era… ¡Raquelita!.¡Qué
contenta se puso la tortuga!
—¡Raquelita!—
murmuró —¡Raquelita! Parece una campanita.
El
tortugo le dio un beso y, muy contentos, se comieron la torta.
Y
Raquelita, como tenía hambre, se comió también las velitas.
(A) Lee detenidamente el texto y responde:
-¿Cuántos años
tardó la tortuga en hacer su viaje por el mundo?.
- ¿Quién le
aconsejó a la tortuga que viajara para averiguar su nombre?
- ¿Cuántas
velitas tenía la torta?
-¿Cuál era el
nombre de la tortuga?
-¿Cómo se
enteró la tortuga de su verdadero nombre?
- ¿Para qué fue la tortuga a dar una vuelta por el mundo?
(B) Localiza los sustantivos del texto . Despúes, clasifícalos.
(c) Analiza morfosintácticamente las siguientes oraciones del texto:
- Al cumplir doscientos años, llegó de vuelta a su casa.
- El tortugo estaba esperando con una torta de doscientas velitas.
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